Desde pequeña, una escena cotidiana despertó en ella una profunda sensibilidad hacia la injusticia. Lo que comenzó como una preocupación por los animales encerrados en una tienda, se transformó con los años en una firme vocación por la lucha contra la trata de personas y la defensa de la justicia social.
En esta entrevista exclusiva para World Vision, descubrimos cómo los sueños de la infancia, la fe y la valentía han guiado el camino de una activista comprometida con transformar el mundo.
¿Qué fue lo que despertó en ti por primera vez las ganas de luchar por la justicia? ¿Recuerdas alguna escena o momento clave?
Hay una anécdota que identifico como mi primer recuerdo ante la injusticia. Yo tenía seis años e iba con mi padre caminando de la mano en un centro comercial. Era tarde y las tiendas estaban cerrando. Era una niña observadora, así que me di cuenta que estaban cerrando mi tienda favorita, la tienda de animales. Solía visitarla a menudo para ver los cachorritos de perro, gato, los pájaros y peces, etc.
Estaban cerrando la tienda, y me di cuenta, por primera vez, que los animales se quedaban encerrados y a oscuras, estaban atrapados y sin poder salir…vivían ahí. Recuerdo sentir que eso era triste, encontré en mí una sensación de injusticia y de crueldad. Así que miré a mi padre y le dije muy convencida «papá, cuando sea mayor voy a dedicarme a ir por todas las tiendas de animales que existen y romper todas esas jaulas de cristal, para que estos animalitos sean libres».
Por supuesto, a esa edad, no podía imaginar el tipo de problemas e injusticias sociales que hay en el mundo. Esa fue la realidad más injusta que había presenciado hasta entonces.
Años después, comencé a conocer de las muchas injusticias existentes, y entre ellas, supe de la trata de personas. Al saber que existen personas que están siendo compradas, vendidas y explotadas, atrapadas sin poder salir, decidí que quería dedicar mi vida a trabajar para que les sea devuelta su libertad y encuentren justicia.
¿Qué significa para ti “ser activista”? ¿Crees que cualquiera puede serlo?
Me identifico como activista porque de manera implícita incluye la palabra “acción”. Hay tantas injusticias en el mundo y tanto dolor, que es fácil pensar que “no puedo hacer ni cambiar nada”, y esa es una de las mayores mentiras que podemos llegar a creernos. Nuestras acciones, voces y opiniones importan y pueden llegar a producir grandes cambios, sólo hace falta mirar a la historia para ver los grandes logros alcanzados, ¡movimientos que comenzaron con tan sólo unos pocos!
Todos podemos ser activistas, personas hacedoras de paz, de justicia y de verdad.
En tu recorrido como activista, ¿cómo ha influido tu fe en las decisiones que has tomado?
Mi fe cristiana es clave en mis decisiones y acciones. Jesús es mi gran referente de justicia social. El denunció públicamente muchas injusticias que fueron normalizadas, se acercó a los más necesitados y dignificó a los rechazados y olvidados. Realmente, transformó la sociedad, la religión, la política y la historia. Entiendo que la fe sin acciones, es una fe muerta. El cristianismo es práctico y consiste en amar a Dios y amar al que tienes al lado. Además, en la Biblia puedes leer una y otra vez como Dios tiene una “debilidad especial” por los marginados, los vulnerables, rechazados y los que sufren, y constantemente se nos dice que Él está por ellos y con ellos. Y yo quiero estar donde está Dios.
¿Qué personas han sido referentes para ti en este camino?
Primeramente, mis padres, son mi gran referente. Son de los que aman y abrazan a todo el mundo, sin hacer preguntas o prejuicios. Las personas que me inspiran son Martin Luther King, Madre Teresa de Calcuta, William Wilberforce, Dietrich Bonhoeffer, Harriet Tubman y muchos otros.
¿Tú también has sentido miedo o dudas al dar pasos importantes? ¿Qué te ayudó a avanzar?
Sí, he tenido que afrontar muchos miedos, y de hecho ¡lo sigo haciendo constantemente! Para afrontar el miedo y la duda, siempre recurro al por qué y para qué. Pienso en lo que superar ese miedo puede aportar, en los resultados positivos que pueden generarse al decidir salir de mi zona de confort.
¿Qué sueñas cuando piensas en un mundo más justo?
Reconozco que contestar esta pregunta es sumamente complejo. Hay mucho por hacer. Pero si hablamos de sueños, desearía ver ciudades donde reine la paz, donde la equidad fluya como ríos caudalosos y la justicia sea como el infinito mar.
¿Qué te ilusiona del podcast de Changemakers? ¿Qué te gustaría transmitir a quien lo escuche?
Me ilusiona conocer a personas que están transformando el mundo ¡qué regalazo! Además, descubriremos a algunos changemakers históricos que han realizado grandes cambios en la historia. Es un espacio profundo y de contenido inspirador.
Para quien se anime a escucharlo, deseo que reciba motivación y herramientas prácticas para transformar el mundo.
Si tuvieras delante a una persona joven que quiere cambiar el mundo pero no sabe cómo, ¿qué le dirías?
Si al ver una injusticia algo se enciende en tu interior. Si eres de las personas que decide “no mirar hacia otro lado” y sientes que quieres hacer la diferencia, estás en el lugar correcto. ¡Escucha el podcast! Comienza a soñar y a actuar.
¿Quieres unirte a la transformación? Descubre más historias de activismo y justicia en nuestro podcast Changemakers y sé parte de un movimiento global que cree en un mundo más justo.